De acuerdo los datos metereológicos, cayeron en la ciudad de Salta y alrededores aproximadamente 4 milimetros de lluvia a lo que le sumó una intensa granizada que puso en vilo especialmente a los vecinos de la zona oeste de la capital salteña. El alerta de tormentas finalizó aunque hoy se preve lluvias persistentes
Si bien es cierto que muchos salteños esperaban por horas la lluvia, nunca pensaron que la tormenta pudiera llegar con tal magnitud que pondría en riesgo muchas viviendas. Los vecinos de los barrios altos del oeste fueron los principales afectados donde a la lluvia se le sumó un fuerte viento y una granizada histórica. “Nunca nos tocó una tormenta así”, manifestó una vecina que junto a sus hijos intentaba sacar el agua de su vivienda.
“Lo peor fue el granizo que me rompio varias chapas”, comentó Juan de de Barrio Roberto Romero que se vió sorprendido por la magnitud del fenómeno metereológico
“Parecía que se caía el techo y entraba agua por todas partes”, dijo Nilda quien, además, admitió “Sentí mucho miedo”
Hasta altas horas de la madrugada los vecinos trabajaron en medio de una persistente llovizna a fin de despejar sus techos y sus pisos afectados por el granizo que a pesar de haber pasado ya varias horas seguía sin derretirse acumulado en las veredas de la zona
EL CENTRO FUE UN CAOS
Como ya es una costumbre, la gestión municipal respecto de las previsiones de inundaciones brilló por su ausencia; aunque desde el diario de la intendenta Romero indicaron que “los canales respondieron”, las críticas de los vecinos del micro y macro centro que sufrieron el anegamiento de las calles y de sus casas, no tardaron en llegar.
LAS CICLOVIAS UN TRAMPA
La única obra realizada por a gestión de “Bettina” se transformó para los automovilistas en una verdadera trampa ya que los pilotes de concreto fueron arrastrados por la corriente que generó en anegamiento de la avenida Belgrano y los ocasionales vehículos que transitaban lo hacían no solo rezando, sino además tratando de esquivar adivinando donde pudieran estar los pilotes ya que la arteria estaba totalmente colapsada
Los vecinos de la ciudad esperan desde hace años las obras que terminen definitivamente con la penuria de transitar por las calles cuando “caen dos gotas”; pero las promesas de todas las gestiones y las “inversiones” nunca han podido evitar las inundaciones y el consiguiente malestar de todos.
