Dos pescadores jujeños, habitués del Dique Campo Alegre, fueron sorprendidos por la tormenta de anoche y habiéndose dormido en la cabina de su camioneta, estacionada en las márgenes del espejo de agua, la misma quedó varada por la repentina crecida del dique.
Los pescadores jujeños, padre e hijos, acostumbran a entretenerse pescando en el Dique Campo Alegre y ayer, como siempre estacionaron su camioneta en la orilla del mismo.
Aparentemente, el padre habría tomado una medicación que lo hizo dormir, encargándole a su hijo que se quedara despierto en el vehículo. Esperaban que la lluvia amainara para poder realizar su actividad predilecta. Sin embargo, el muchacho también se durmió al arrullo de la lluvia y cuando despertaron se encontraron que estaban prácticamente rodeados de agua por el repentino crecimiento del caudal del dique.
“Como a las 9 y media de la noche me despierto y… mi hijo al lado. Bajo el vidrio y el agua ya llegaba a la mitad de la rueda”, relata el desafortunado pescador. Su hijo le refirió que el pensaba que se iba a parar la lluvia “Te quise despertar, pero vos no reaccionabas (estaba bajo los efectos del medicamento)” continúa su relato. “Hice el intento de sacar la camioneta. Puse la 4×4 pero nada. Y dije no toco más” finaliza. Los hombres salieron de la camioneta por sus propios medios.
Finalmente, con la ayuda de otra camioneta, y habiendo solicitado ayuda a las autoridades policiales el vehículo fue rescatado en horas de la tarde de este jueves, pero les quedará una anécdota más para contar de sus actividades “pescadoriles”.
